BMW hace historia regresando a Nordschleife en Nürburgring.

BMW ha escrito otro capítulo en la historia de los deportes de motor en el legendario Nordschleife, en Nürburgring.
Ayer, un moderno vehículo de Fórmula 1 recorrió los 20,8 kilómetros de la pista por primera vez en 31 años y ante 45.000 espectadores.
El piloto del equipo BMW Sauber F1, el aleman Nick Heidfeld tuvo el privilegio de pilotar de nuevo un Fórmula 1 por el retorcido circuito de Nordschleife, el Viejo Nurburgring, el infierno verde. El trazado alemán, vetado para los grandes premios desde que Niki Lauda casi pierde la vida en una de sus curvas en 1976, es un mito de este deporte. Con 20,8 kilómetros y 73 curvas, parecía imposible que un monoplaza actual pudiera rodar con seguridad en una pista plagada de trampas, con saltos, curvas ciegas y sin una sola escapatoria.
BMW lo ha hecho posible, y con un coche con una configuración casi idéntica a la de cualquier gran premio. Las únicas diferencias estaban en los neumáticos, más lentos de lo habitual, y en la altura del monoplaza, que se elevó entre cuatro y ocho centímetros para evitar los golpes con el asfalto. Pese a que se había vendido lo contrario, el objetivo no era batir el récord de vuelta del circuito. De hecho, el mejor de los tres pasos por meta de Heidfeld con el F1.06 paró el crono en 8:34, a más de dos minutos del registro oficial, logrado con un Porsche 956.
Heidfeld comentaba sobre su experiencia: "Ha sido increíble. Pensaba que sería fantástico rodar en el Nordschleife antes de empezar, pero ha sido aún mejor de lo que esperaba. Esta pista es la mejor del mundo. Me encantaría haber vaciado el depósito."
"Fue un momento muy especial cuando dejé el circuito de gran premio en dirección al Nordschleife. Me han impresionado la sección del Bergwerk y el Döttinger Höhe. Nunca olvidaré este día mientras viva. Otra experiencia especial se ha unido a mis buenos recuerdos de la infancia y a mis éxitos en competición."
El director de BMW Motorsport Director Mario Theissen, dijo: "Queríamos ofrecer a los aficionados un regalo especial, y creo que lo hemos hecho con todo el programa de motorsport de BMW.
El BMW M3 GTR que Olaf Manthey ha presentado hoy ha sido recibido como si se tratara de un viejo amigo. El coche es, de hecho, demasiado atlético para el museo. Por supuesto, el punto culminante ha sido el recorrido de Nick con el F1.06. Le rogamos que fuera con cuidado.
El día ha sido un homenaje a los aficionados y a este circuito, único en el mundo de la competición. Por una vez, los tiempos de vuelta han sido secundarios."
A pesar de una exhibición inusualmente dura para los neumáticos y la transmisión, Heidfeld logró una velocidad punta de 275 km/h en la larga recta llamada 'Döttinger Höhe'. La segunda vuelta fue la más rápida y la completó en 8:34 minutos. Un coche con cámara tomó fotos del piloto en algunas secciones de las tres vueltas y Heidfeld redujo velocidad para las fotografías.
El F1.06 se ajustó para rodar por este circuito, muy desigual, con cuatro centímetros en el eje delantero y ocho en el trasero. Ninguna otra modificación se llevó a cabo, aunque se tuvieron que tomar medidas especiales para la comunicación inalámbrica. El jefe del equipo Beat Zehnder viajó con el helicóptero para garantizar el enlace por radio en toda la distancia, en lugar de sentarse en el muro del pit lane como de costumbre.